La línea metropolitana fue la primera línea de metro del mundo y fue inaugurada el 10 de enero 1863, tres años después de su construcción. Para crear las líneas de subterráneos se empleaba el método llamado de “cortar y cubrir”. Esto significaba que cavaban unos metros sólo y cubrían.
La ruta de la línea entre Paddington y Bayswater (inaugurada en 1868) hizo necesaria la demolición de las casas 23 y 24 de Leinster Gardens. Leinster Gardens estaba en una zona de lujo de Londres, así que se decidió construir una fachada de un metro y medio de espesor, que concordase con la casas de uno y otro lado de la demolición.
Tras la fachada de la izquierda se puede ver un tramo de vía férrea a la intemperie. El área expuesta fue utilizada por las locomotoras de vapor para dejar salir el vapor y el humo, cosa que no debe haber sido demasiado agradable para las casas vecinas.
Si se presta atención a los pequeños detalles se puede ver fácilmente la naturaleza falsa de estas fachadas. Las ventanas están simplemente pintadas, y la puerta de entrada no tiene buzón.
